JESÚS MÍNGUEZ
AS.com
El día después de que la Agencia Mundial
Antidopaje acusara a Rusia de dopaje de Estado, tocó despejar la denuncia desde
Moscú. Con sorna y la evidencia de que avanzar en la mejora de un sistema
corrupto e ineficaz será difícil. “La gente tiene una imaginación muy viva. La AMA vive como en los tiempos
del primer James Bond. Sí, yo llevo una pistola y todas las tardes bajo a los
sótanos de la Lubianka
(la que fue sede del temido KGB)”, ironizó Nikita Kamaev, director ejecutivo de
la Agencia Rusa
Antidopaje (RUSADA), que advierte “cierta politización” en el informe.
En esas 323 páginas la AMA recomendó la expulsión de los atletas rusos
de cualquier competición, Juegos de Río 2016 incluidos, si no se avanza en la
lucha antidopaje. Y se cuenta que agentes del servicio secreto (FSB, heredero
del KGB) “impusieron un clima intimidatorio en los laboratorios de Sochi y
Moscú, en los procesos de análisis y en el personal”. También se pide el
castigo a perpetuidad de cinco atletas y cinco entrenadores y la suspensión del
laboratorio de Moscú, donde se destruyeron 1.417 muestras sospechosas.
Este lunes, la
AMA se apresuró a retirar la acreditación al centro dirigido
por Grigori Rodchenkov, quien admitió esa destrucción y era clave “en la conspiración
para extorsionar” a atletas que daban positivo. Todos los test serán
transportados a laboratorios alternativos, en principio Colonia y Lausana.
El informe apunta al ministro de Deportes, Vitali Mutko, al
que no se acusa directamente pero se duda de que no estuviera al tanto del
dopaje. Este, que pertenece a la
FIFA y dirige el Mundial 2018, se reunirá esta semana con el
presidente Vladimir Putin para hablar “del deporte olímpico”. No se esperan
novedades. Hoy, el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, se quejó de que
“siempre que se hagan acusaciones, hay que tener evidencias. Mientras no haya
pruebas, es difícil reaccionar ante unas acusaciones que parecen no tener
fundamento”.
Los 323 folios con escuchas y declaraciones de testigos
parecen no ser suficientes. “Es nuestro ministro”, recordó Peskov sobre Mutko,
que no peligra en su cargo. “Las recomendaciones de la AMA ayudarán a mejorar nuestro
sistema antidopaje en un futuro cercano”, admitió, eso sí.
Valentin Balakhnichev, expresidente de la Federación Rusa y
tesorero de la IAAF ,
acusado de extorsión para no revelar positivos, anunció que irá al TAS. “Nos
querían castigar con el gas, el petróleo o Ucrania y ahora nos quieren castigar
con el deporte”, arguyó. Bond, James Bond, no está en el informe. Pero también
ha aparecido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario