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Kevin López se sumó a la fiesta de las platas españolas en una final de 800 dominada por el polaco Adam Kszczot. El sevillano controló la carrera con inteligencia y se llevó su botín de Suecia. Su compañero Luis Alberto Marco, con problemas físicos, terminó en sexta plaza.
La Roja de atletismo ya tiene su tercera medalla de plata. Kevin López, una de las grandes estrellas de la delegación patria, no falló en el momento crucial del campeonato. El mediofondista andaluz no pudo ganar a un intratable Kszczot, al resto los dominó a su antojo.
Kevin López salió marcando el paso de la prueba, con su compañero de entrenamientos Luis Alberto Marco guardándole la espalda. Nadie osaba meterse con la dupla de discípulos de Paco Gil. Hasta que un irreverente Kszczot pegó un cambió de ritmo descomunal que todos entendieron a la primera. El polaco fue el vencedor del siempre temido 800 con un registro de 1:48.69.
Seguro de su plata
Por detrás, mirando una y otra vez la pantalla para saber qué tramaban sus enemigos, Kevin López manejaba con solvencia a un grupo que agonizaba. Nunca temió perder la plata. La sensación de seguridad del sevillano fue absoluta, para firmar un tiempo de 1:49.31 en meta. Su hoja de servicios en beneficio del atletismo patrio será tan amplia como sus sueños.
Tercero, en un espectacular duelo con Ananenka, llegó el británico Mukhtar Mohammed, 1:49.60. La pena para el atletismo español fue el sexto puesto de Luis Alberto Marco, con dolores de garganta en las últimas fechas. Al menos, su amigo Kevin López pudo vengarlo en otra gesta del medio fondo español.
Kevin López se sumó a la fiesta de las platas españolas en una final de 800 dominada por el polaco Adam Kszczot. El sevillano controló la carrera con inteligencia y se llevó su botín de Suecia. Su compañero Luis Alberto Marco, con problemas físicos, terminó en sexta plaza.
La Roja de atletismo ya tiene su tercera medalla de plata. Kevin López, una de las grandes estrellas de la delegación patria, no falló en el momento crucial del campeonato. El mediofondista andaluz no pudo ganar a un intratable Kszczot, al resto los dominó a su antojo.
Kevin López salió marcando el paso de la prueba, con su compañero de entrenamientos Luis Alberto Marco guardándole la espalda. Nadie osaba meterse con la dupla de discípulos de Paco Gil. Hasta que un irreverente Kszczot pegó un cambió de ritmo descomunal que todos entendieron a la primera. El polaco fue el vencedor del siempre temido 800 con un registro de 1:48.69.
Seguro de su plata
Por detrás, mirando una y otra vez la pantalla para saber qué tramaban sus enemigos, Kevin López manejaba con solvencia a un grupo que agonizaba. Nunca temió perder la plata. La sensación de seguridad del sevillano fue absoluta, para firmar un tiempo de 1:49.31 en meta. Su hoja de servicios en beneficio del atletismo patrio será tan amplia como sus sueños.
Tercero, en un espectacular duelo con Ananenka, llegó el británico Mukhtar Mohammed, 1:49.60. La pena para el atletismo español fue el sexto puesto de Luis Alberto Marco, con dolores de garganta en las últimas fechas. Al menos, su amigo Kevin López pudo vengarlo en otra gesta del medio fondo español.
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