viernes, 25 de abril de 2014

ÉL LO TENÍA EN LA CABEZA



SERGI LÓPEZ
El País.com

El regreso de Michael Phelps es bueno para la natación porque atrae público a las piscinas. Las entradas para asistir al Grand Prix de Mesa, en Arizona, se agotaron en cuestión de horas cuando el nadador más importante de todos los tiempos anunció su presencia en el meeting. No hay nada como su gancho publicitario para promocionar un deporte que, hasta su aparición en los Juegos de Sidney, en 2000, era mucho más minoritario.
Phelps ya sabía que volvería a competir. Lo tenía en su cabeza. Se retiró tan joven, después de los Juegos de Londres, en 2012, que no podía ser de otro modo. Se pasó año y medio fuera de las piscinas porque quería hacer su vida, pero eso no ha sido nada nuevo. Ya lo hizo después de los Juegos de Pekín, en 2008, y regresó en 2009, para los Mundiales, antes de tomarse un año y medio de libranza. Cuando reapareció en 2012 lo hizo a un nivel admirable.
Ahora el esquema se repite. Se ha estado entrenando con Bob Bowman, su técnico de toda la vida, en la sede del NBAC, el club del norte de Baltimore donde se conocieron y que luego compraron y gestionan. Su marca de 52,84s en la serie preliminar de la mañana de ayer, en los 100 mariposa, está lejos de sus mejores registros pero invita a pensar en una buena proyección.
Yo estuve ocho años sin competir y cuando regresé me encontraba fuera de forma. Cada nadador es un mundo. A él le debe haber costado, pero con su base de entrenamiento todo es posible. Ni siquiera creo que un atleta de su nivel haya estado nunca fuera de forma. Si ha decidido regresar es porque sabe que, con 28 años, todavía puede nadar muy bien. No creo que nade las pruebas de 400 metros pero las pruebas de 100 y 200 las puede hacer perfectamente.
Phelps no necesita más dinero. La publicidad le ha hecho rico. Sus patrocinadores, marcas como Kellogg's, Hilton, o como los sándwiches Subway, le han contratado durante todos estos años. Él no vuelve por eso. Vuelve porque le gusta competir. Supongo que su objetivo es entrar en el equipo americano que disputará los Mundiales del año que viene y los Juegos de Río en 2016.

LA VUELTA DEL ANFIBIO PHELPS



CARLOS ARRIBAS
El País.com

La tarde londinense de agosto de 2012 en que colgaron en su cuello su 22ª medalla olímpica (la 18ª de oro), Michael Phelps, un ser anfibio, lo anunció como quien promete que va a dejar de fumar: "No me volveréis a ver en el agua. He alcanzado todos mis objetivos. He pasado tanto tiempo de mi vida en el agua que no volveré a tirarme a una piscina, ni siquiera por diversión". Este jueves, privilegio solo de los más grandes, se llevó la contraria estruendosamente en la desértica y calurosa Mesa (Arizona), en cuyo Grand Prix volvió a la competición en su prueba fetiche, los 100m mariposa. Como pocos dudaban, volvió a lo grande: más grande físicamente (con barba y un pequeño cinturón adiposo a la altura del pliegue del bañador en la cintura) y grande también como nadador, con un tiempo de 52,84s (3s más lento que su récord del mundo, batido en Roma en 2009 con el bañador luego prohibido; 2s más lento que el que le valió su tercer oro en Londres), que fue el mejor entre el más de centenar de nadadores que participaron en las 14 series de la prueba, y que no está nada mal para estas alturas de la primavera. Una décima más rápido que Ray Lochte, por ejemplo, y más rápido también que Eugene Godsoe, que ganó el título nacional el pasado verano. "Me ha encantado, pero lo puedo hacer mejor, por supuesto", dijo el nadador. "He cometido algunos errores, que corregiré esta noche en la final".
La promesa, el compromiso de Phelps de no volver a mojarse, duró 14 meses, mucho menos de lo que muchos apostaban y que ahora recuerdan que Michael Jordan logró aguantar tres años antes de volver a las canchas como un campeón, que Lance Armstrong tardó cuatro en retornar al Tour que finalmente mataría su leyenda, que otros inmortales que regresaron porque la vida sin competición no era ni vida ni nada, como Mark Spitz, Ian Thorpe, como Michael Schumacher, tardaron bastante más. Pero Phelps, que no solo es el más grande nadador de la historia olímpica sino también, en palabras del anterior más grande, Mark Spitz, "el más grande competidor que nadie haya conocido", también debía ser el más rápido en regresar. Y también convertirse en el más longevo. Si persiste en su idea de llegar a Río 2016, cuando ya tendrá 31 años, estos serían sus cuartos Juegos Olímpicos.
En octubre pasado, con mono de cloro y quizás ahogado por la saturación de oxígeno, de vida al aire libre sobre tierra firme que tan deprimente ha sido para otros campeones antes que él, Phelps, que dentro de un par de meses cumplirá 29 años, volvió de nuevo a la piscina de North Baltimore y le dijo a Bob Bowman, su entrenador desde que tenía 11 años, que quería volver. "Pesaba entonces 102 kilos, 18 más de los que pesaba en Londres 2012. Ahora estoy en 87, lo que no es poco descenso", dijo Phelps la víspera en su primera conferencia de prensa en dos años. Y en ella el Baltimore kid bromeó presentándose como un "abuelo". "Y la verdad es que cuando empecé de nuevo era como un saco".
El hombre de los ocho oros de Pekín se había trabajado el sobrepeso con unos meses dorados de dolce far niente, meses en los que dedicó su tiempo a jugar al golf, al póker, a ganar dinero siendo hombre anuncio de una cadena de restaurantes de sándwiches, una empresa de piscinas prefabricadas y una firma de ropa deportiva. "En este tiempo no he hecho nada", dijo Phelps, que se entrena cinco días a la semana y vuelve sin patrocinador, sin lucir publicidad. "Y empecé a notar que me faltaba algo, que echaba de menos la natación. Así de sencilla es la razón de mi regreso. Solo vuelvo para divertirme. Y me estoy divirtiendo de verdad".
Phelps reconoció que el momento más duro de su carrera fue la preparación para Londres, la dificultad de encontrar una motivación que le permitiera sacrificarse lo necesario para mantener su imposible nivel de ocho oros de Pekín. Por eso redujo a siete sus competiciones en Londres (cuatro oros). Por eso, quizás, siempre que llegue a Río, será aún más corto. "No sé si estaré en Río y a qué nivel", dijo en Arizona. "Pero mi vida siempre ha consistido en objetivos y en deseos que quería cumplir. Y ahora es también así. Tengo objetivos y sueños. Es lo que he hecho en el pasado y estoy expectante por saber adónde me lleva el camino que se abre ante mí. El viaje comienza ahora".
Antes de Río 2016 se disputa en 2015, en Moscú, el Mundial, una cita a la que no debería faltar, lo que le obligará a acelerar su preparación. Así, los próximos campeonatos nacionales, en agosto, forman parte de los complicados sistemas de calificación de Estados Unidos para el Mundial. "Pero no me preocupa lo que la gente piense si no logro alcanzar el nivel que tuve", dijo. "Hago esto solo por mí. Si no logro los éxitos que la gente espera o que la gente cree que debo alcanzar, y si por eso se piensa que mi carrera queda manchada, eso es su problema".

MICHAEL PHELPS REAPARECE QUEDANDO SEGUNDO TRAS RYAN LOCHTE



1ª JORNADA GRAND PRIX MESA (ARIZONA)
FINALES
HOMBRES
100 metros libre
  1 Adrian, Nathan   48.23     
  2 Schoeman, Roland  49.39  
  3 Dwyer, Conor     49.57 
  4 Lochte, Ryan     49.68  
  5 Townsend, Darian  49.88 
  6 Feigen, Jimmy    49.93     
  7 Schneider, Josh  50.53 
  8 Lindenbauer, Matthias  50.60  

400 metros libre
  1 McBroom, Michael  3:58.43  
  2 Dwyer, Conor     3:53.85  
  3 Clary, Tyler     3:54.47 
  4 Egan, Liam       3:57.82  
  5 Weiss, Michael   3:58.37    
  6 Burns, Aidan     3:59.13  
  7 Grieshop, Sean   3:58.67   
  8 Acosta, Marcelo      4:00.83     
100 metros mariposa
  1 Lochte, Ryan     51.93 
  2 Phelps, Michael  52.13  
  3 Dunford, Jason   53.08 
  4 Lynch, Justin    53.48  
  5 Martinez, Luis   53.66  
  6 Subirats, Albert  53.71  
  7 Godsoe, Eugene   53.78  
  8 Josa, Matthew    54.22  

200 metros braza
1 Murillo, Jorge   2:14.81  
2 Al-Barazi, Azad  2:15.43  
3 Mickelson, Carl      2:16.50  
4 Alexandrov, Mike  2:16.71  
5 Cassell, Gunther  2:19.91     
6 Vissering, Carsten  2:20.21     
7 Elkamash, Youssef  2:20.60  
8 Fischer, Brandon  2:20.96   

MUJERES
100 metros libre
  1 Schmitt, Allison  54.46  
  2 Romano, Megan    55.05  
  3 Coughlin, Natalie  55.14     
  4 Ledecky, Katie   55.22 
  5 Weir, Amanda     55.34  
  6 Manuel, Simone   55.42     
  7 Geer, Margo      55.79     
  8 Coffman, Cheyenne  56.13  

400 metros libre
  1 Ledecky, Katie   4:03.84  
  2 Ryan, Gillian    4:08.51  
  3 Mann, Becca      4:08.70  
  4 Smith, Leah      4:08.81 
  5 Pinto, Andreina  4:10.79  
  6 Friis, Lotte     4:10.91  
  7 Runge, Cierra    4:12.78  
  8 Schmitt, Allison  4:12.12   

100 metros mariposa
  1 Donahue, Claire  59.05  
  2 McLaughlin, Katie  59.60 
  3 Erasmus, Marne   1:00.66  
  4 Colorado, Carolina     1:00.80 
  5 Hoff, Katie      1:00.95  
  6 Kendall, Amanda  1:01.12     
  7 Ward, Andrea     1:01.54  
  8 Baker, Kathleen  1:02.05  

200 metros braza
 1 Atkinson, Alia   2:25.52 
 2 Lawrence, Micah  2:26.60
 3 Larson, Breeja   2:28.87  
 4 Colleou, Stina   2:31.58
 5 Gardell, Stina   2:33.10 
 6 Dvariskyte, Raminta  2:33.36  
 7 Leverenz, Caitlin  2:33.51 
 8 Nicholas, Tara-Lynn  2:35.19 

lunes, 21 de abril de 2014

MEB KEFLEZIGHI, PRIMER AMERICANO EN GANAR EL MARATÓN DE BOSTON DESDE 1983


EFE

Meb Keflezighi ganó hoy la 118 edición del maratón de Boston con un tiempo de 2:08:37, la segunda mejor marca lograda por un estadounidense en esta carrera, que no ganaba un atleta de Estados Unidos desde 1983.
En la categoría femenina, la victoria se la llevó la keniana Rita Jeptoo con un tiempo de 2h18.57. Fue su tercer triunfo en Boston tras los conseguidos en 2006 y 2013.
Keflezighi, de 38 años y origen eritreo, lideró la carrera en los últimos kilómetros, aunque al final tuvo que zafarse de un ataque del keniano Wilson Chebet, que terminó segundo a 11 segundos del estadounidense.
Bajo el recuerdo
El maratón de este año se disputó bajo fuertes medidas de seguridad y el recuerdo de los atentados de 2013, apenas unos días después de conmemorarse el primer aniversario de los ataques, que dejaron tres muertos y cientos de heridos y mutilados.
Durante la semana pasada la ciudad se vistió de gala para homenajear a las víctimas, así como a todos los que ayudaron en las labores de socorro, y recordar que Boston se ha recuperado de las heridas sufridas por el peor atentado acaecido en Estados Unidos después del 11 de septiembre de 2001.
La carrera de este año, bajo un sol espléndido, contó con más corredores que la anterior, unos 36.000, en un alarde de valentía por parte de los atletas y que respalda el nuevo lema de la ciudad tras sufrir los ataques: "Boston Strong" (Boston Fuerte).

Clasificación hombres:
 .1. Meb Keflezighi (USA) 2h08.37
 .2. Wilson Chebet (KEN) 2h08.48
 .3. Frankline Chepkwony (KEN) 2h08.50
 .4. Vitaliy Shafar (UKR) 2h09.37
 .5. Markos Geneti (ETH) 2h09.50
 .6. Joel Kimurer (KEN) 2h11.03
 .7. Nicholas Arciniaga (USA) 2h11.47
 .8. Jeffrey Eggleston (USA) 2h11.57
 .9. Paul Lonyangata (KEN) 2h12.34
 10. Adil Annani (MAR) 2h12:43

- Clasificación mujeres:
.1. Rita Jeptoo (KEN) 2h.18.57
.2. Buzunesh Deba (ETH) 2h.19.59
.3. Mare Dibaba (ETH) 2h.20.35
.4. Jemima Jelagat Sumgong (KEN) 2h.20.41
.5. Meselech Melkamu (ETH) 2h.21.28
.6. Aleksandra Duliba (BLR) 2h.21.29
.7. Shalane Flanagan (USA) 2h.22.02
.8. Sharon Cherop (KEN) 2h.23.00
.9. Pholes Ongori (KEN) 2h.23.22
10. Desiree Linden (USA) 2h.23.54

Meb Keflezighi ganó hoy la 118 edición del maratón de Boston con un tiempo de 2:08:37, la segunda mejor marca lograda por un estadounidense en esta carrera, que no ganaba un atleta de Estados Unidos desde 1983.
En la categoría femenina, la victoria se la llevó la keniana Rita Jeptoo con un tiempo de 2h18.57. Fue su tercer triunfo en Boston tras los conseguidos en 2006 y 2013.
Keflezighi, de 38 años y origen eritreo, lideró la carrera en los últimos kilómetros, aunque al final tuvo que zafarse de un ataque del keniano Wilson Chebet, que terminó segundo a 11 segundos del estadounidense.
Bajo el recuerdo
El maratón de este año se disputó bajo fuertes medidas de seguridad y el recuerdo de los atentados de 2013, apenas unos días después de conmemorarse el primer aniversario de los ataques, que dejaron tres muertos y cientos de heridos y mutilados.
Durante la semana pasada la ciudad se vistió de gala para homenajear a las víctimas, así como a todos los que ayudaron en las labores de socorro, y recordar que Boston se ha recuperado de las heridas sufridas por el peor atentado acaecido en Estados Unidos después del 11 de septiembre de 2001.
La carrera de este año, bajo un sol espléndido, contó con más corredores que la anterior, unos 36.000, en un alarde de valentía por parte de los atletas y que respalda el nuevo lema de la ciudad tras sufrir los ataques: "Boston Strong" (Boston Fuerte).
 - Clasificación hombres:
 .1. Meb Keflezighi (USA) 2h08.37
 .2. Wilson Chebet (KEN) 2h08.48
 .3. Frankline Chepkwony (KEN) 2h08.50
 .4. Vitaliy Shafar (UKR) 2h09.37
 .5. Markos Geneti (ETH) 2h09.50
 .6. Joel Kimurer (KEN) 2h11.03
 .7. Nicholas Arciniaga (USA) 2h11.47
 .8. Jeffrey Eggleston (USA) 2h11.57
 .9. Paul Lonyangata (KEN) 2h12.34
 10. Adil Annani (MAR) 2h12:43
- Clasificación mujeres:
 .1. Rita Jeptoo (KEN) 2h.18.57
 .2. Buzunesh Deba (ETH) 2h.19.59
 .3. Mare Dibaba (ETH) 2h.20.35
 .4. Jemima Jelagat Sumgong (KEN) 2h.20.41
 .5. Meselech Melkamu (ETH) 2h.21.28
 .6. Aleksandra Duliba (BLR) 2h.21.29
 .7. Shalane Flanagan (USA) 2h.22.02
 .8. Sharon Cherop (KEN) 2h.23.00
 .9. Pholes Ongori (KEN) 2h.23.22
 10. Desiree Linden (USA) 2h.23.54
 

jueves, 10 de abril de 2014

ASAFA POWELL Y SHERONE SIMPSON, SANCIONADOS CON 18 MESES

REUTERS

El atleta jamaicano Asafa Powell, de 31 años, podrá volver a las pistas de atletismo de manera oficial el próximo 20 de diciembre. El Comité de Disciplina Antidopaje de su país le ha impuesto una sanción al corredor de 18 meses por dopaje. Esta condena tiene, sin embargo, "carácter retroactivo", por lo que el excampeón de los 100 metros solo tendrá que esperar ocho meses para competir de nuevo, ya las muestras que fueron positivas se recogieron el 21 de junio de 2013.
Powell dio positivo durante los campeonatos nacionales de Jamaica. El atleta, que se perdió el pasado Mundial por el positivo, alegó en enero que el preparador físico Chris Xuereb le había suministrado nueve suplementos incluido el Epiphany D1, que contendría oxilofrina.
Corren malos tiempos para el rincón planetario de la velocidad. Este martes también fue sancionada con la misma pena, Sherone Simpson, medallista olímpica de oro y plata en los relevos 4x100.  "La señorita Simpson fue negligente en todas las circunstancias", expresó el director de la comisión, Lennox Gayle. La jamaicana, de 29 años, volverá a las pistas el mismo día que su compatriota porque su condena tiene efecto retroactivo.

viernes, 4 de abril de 2014

VICTOR CONTE ENTRENA BOXEADORES Y TREVOR GRAHAM ESTÁ INHABILITADO

Victor Conte prepara púgiles y Trevor Graham está inhabilitado

JESÚS MÍNGUEZ
AS.com

En la historia de los positivos de Justin Gatlin se entrecruzan dos nombres: Trevor Graham y Victor Conte. El primero era el preparador del oro olímpico en Atenas 2004 y campeón mundial de 100 y 200 en Helsinki 2005. El segundo, un gurú de la preparación y propietario de los laboratorios BALCO. De un pique entre los dos acabó explotando la gran mentira de los sprinters estadounidenses.
El 5 de junio de 2003, Conte escribió una carta para la Federación Internacional de Atletismo (IAAF) y la Agencia Antidopaje de EE UU (USADA) que no llegó a enviar, pero que tiró a la basura del laboratorio donde hurgaban dos periodistas del San Francisco Chronicle en busca de evidencias de dopaje.
La carta. Ahí se leía: “Graham da a sus atletas testosterona oral que trae de México y que desaparece del cuerpo a través de la orina. Es indetectable menos de una semana después de su uso. Trevor hace que sus atletas compitan cada dos semanas y los esconde”. Casi en paralelo, Graham enviaba a la USADA una jeringuilla con restos de THG, el anabolizante indetectable que había inventado Conte y con el que se dopaban atletas y estrellas del béisbol.
La testosterona de la que hablaba Conte apareció precisamente en el cuerpo de Gatlin en 2006. El discípulo de Graham ya había dado positivo en 2001 con unas anfetaminas que dijo utilizar para tratar un déficit de atención. La IAAF le levantó la sanción de dos años. Ocho le cayeron por la testosterona, reducidos a cuatro por colaborar con los investigadores...
Graham, por cuyas manos pasaron dopados como Marion Jones (nunca dio positivo), Alvin Harrison, CJ Hunter, Tim Montgomery, o Antonio Pettigrew, fue suspendido de por vida por la USADA. Y Conte pasó cuatro meses en prisión. Pero el ex de BALCO, que ahora se presenta como “abogado contra el dopaje”, ha levantado SNCA (Nutrición Científica para Preparación Avanzada), que se ha hecho fuerte en el boxeo de élite. Nonito Donaire, Ami Khan, Perro Angulo o Zab Judah confían en sus papillas y sus consejos. ¿Peligroso? “Ellos saben que estarán bajo sospecha, que serán cuestionados, pero ahora sé cuál es la línea y todos están limpios”, responde Conte.

JUSTIN GATLIN: "MI SANCIÓN FUE COMO UNA MALDICIÓN Y UN REGALO"



Montserrate Hernández
AS.com

—¿Qué le trae de vuelta por España? 
—Es la segunda vez que estoy en su país. Competí en el meeting de Madrid en 2011, donde gané. Me encanta. Si tuviera que irme de Estados Unidos, este es uno de los lugares que me gustaría para quedarme a vivir. Y quiero ayudar a crecer a mi marca. (XTEP, la firma de ropa deportiva que luce el Villarreal, le invitó a una serie de actos promocionales).

—¿En qué momento de su vida deportiva se encuentra a sus 32 años? 
—Diría que estoy en el mejor momento físico de mi carrera. Mentalmente estoy preparándome para afinar más aún.

—Los atletas atraviesan por un año de transición, sin Juegos Olímpicos ni Mundiales al aire libre. ¿Qué citas aparecen en las primeras hojas de su calendario?
—Es un año extraño, pero hay que entrenarse igual para mantenerse al máximo nivel. Empezaré la temporada el 3 de mayo, en Jamaica. A partir de ahí, el 11 participaré en Tokio; el 18, en Shanghai; y el 21, en Pekín.

—No es habitual para un velocista permanecer tantos años en la élite. En su caso, con una interrupción de cuatro años por dopaje. ¿Cuál es el secreto para estar, pasada la treintena, a este nivel?
—Siempre me entreno para mejorar. Así, quiero ganar al Justin de 2013, y el Justin de 2013 quiso ganar al Justin de 2012. Es mi gran objetivo.

—Hemos hablado de sus próximas competiciones. ¿Pero cuál es su próximo gran objetivo?
—Esta temporada quiero romper el récord americano (9.68) y ganarme un puesto para los Mundiales de 2015. Pienso en los Juegos Olímpicos de Brasil, en 2016, donde aún no he estado; y en el Mundial de Londres, en 2017.

—Ha sido el único velocista capaz de superar a Usain Bolt, al que ganó en junio pasado. ¿Cree que es el mejor de la historia?
—Es un gran atleta, capaz de correr a nueve-cinco. Tenemos una rivalidad de caballeros. Somos competidores en la pista y amigos fuera de ella. Nos llevamos bien. Respeto a todos los rivales, porque también hay gente joven muy buena.

—¿Es posible bajar de 9.58?
—Sí. Y espero ser yo quien lo consiga.

—¿Cómo prepara los Trials (pruebas de selección) en Estados Unidos?
—(Risas) Yo diría que estoy hasta más nervioso en esas pruebas. Los Trials son más laboriosos, incluso, que un Mundial o unos Juegos Olímpicos. Para superar a tantos atletas buenos debo estar siempre preparado al máximo.

—España atraviesa por un momento dulce en deporte. ¿A qué deportista admira o quién le parece un ejemplo?
—Diría que Pau o Marc Gasol, a los que tengo cerca en Estados Unidos. Sin embargo, me gusta mucho Cristiano Ronaldo. Es un jugador físico, con una gran estatura. Cristiano puede saltar muy alto y es tremendamente rápido. Trabaja muy duro, como un verdadero atleta.

¿Sería Cristiano bueno en el atletismo?
—Sí, por supuesto. Es un gran atleta. ¿Por qué no? Creo que él es muy completo. No solo físicamente, sino que también es un hombre guapo (risas). Podría ser muy comercial en Estados Unidos.

—En España el dopaje es un tema sensible. Desde Estados Unidos, ¿cómo se ve a España en este sentido?
—El dopaje es una parte de todos los deportes en general. Algo que sabes que va a suceder. Es como si tienes sol, también sabes que vas a tener lluvia. Y en este aspecto, en absoluto creo que España esté manchada por el dopaje. De hecho, en los últimos años los deportistas españoles están muy arriba en todo el mundo y sin más problemas que en otros países.

—Si hablamos de dopaje, usted cumplió una sanción de cuatro años que podría haberle retirado del atletismo. ¿Al final le hizo más fuerte?
—Creo que esa sanción fue una bendición disfrazada. Tal vez, si quieres llamarlo así, fue un regalo y una maldición. Un regalo envenenado para después rendir con más fuerza. Demostré lo que había pasado y colaboré con la justicia. Es muy difícil para un atleta saber lo que ocurre a su alrededor y mantenerse al día con todo lo que sucede y con las personas que le rodean. Los atletas también podemos ser víctimas en estas situaciones.

—¿Considera un error el haberse dopado?
—Por un lado, fue un error por mi parte por rodearme de las personas equivocadas, a las que no tuve que darles mi confianza. Pero también fue una injusticia ver que otras situaciones no fueron tratadas igual.

—¿Qué parte asume de aquel error? 
—¿Mi error? Me reafirmo en lo que dije. Fue cosa de un fisioterapeuta. La lección que aprendí es que debes tener un círculo de amigos y preparadores más cercano, de más confianza. Aquello me enseñó a ser un hombre y mejor deportista.

—¿Qué fue lo más duro de esos cuatro años?
—Lo peor fue no poder correr. Amo competir. Soy un fanático de mi deporte y me dolió no poder defender mis tiempos en la pista.

—¿En qué espejo se ha mirado como atleta?
—Hay una gran colección de estrellas de mi deporte, como Ben Johnson, Maurice Greene… De los deportistas americanos, admiro a Bo Jackson. Jugó en las grandes ligas en béisbol y en fútbol americano durante varios años a la vez. Y lo hizo muy bien. Él es el único que ha conseguido participar en un juego de estrellas en dos deportes diferentes. Me gustan los deportistas completos.

—Usted también lo intentó en el fútbol americano durante su sanción de cuatro años. ¿Cómo le fue?
—(Se ríe). Sí, lo hice. Ahora le tengo mucho respeto a ese deporte después de estar en el campo y ser parte de un equipo. Llegué a realizar la pretemporada, pero no jugué. Me sentía como un pez fuera del agua. Sentí que el atletismo era mi casa, así que le dije a mi agente: ‘Voy a volver al atletismo’.

—¿Cuál es el mejor momento de su carrera deportiva: el oro de los Juegos de Atenas o el día que venció a Usain Bolt? 
—Ganar el oro en Atenas en 2004, sin duda. Eso implica ser el mejor del mundo. No hay nada superior a eso.

—Por último, con 32 años, ¿ve en el horizonte el final de su carrera?
—No. Un verdadero campeón sabe cuándo debe dejarlo. A veces he pensado en 2017 como fecha de mi adiós, pero tuve un sueño hace poco en el que me encontraba corriendo en los Juegos Olímpicos de 2020. En la actualidad, soy el hombre viejo más rápido del mundo, así que ¿por qué debería parar?