Redacción DeporCuba
El 2014, pese al título mundial bajo techo que Yarisley
Silva conquistó en Sopot, no fue un año especialmente pródigo en su carrera. Un
déficit inicial en la preparación la llevó a bregar un tanto al límite durante
una temporada que finalmente saldó con algunas incursiones, tres para ser
exactos, sobre 4.70
metros como mejor registro. Ello, lejos de conducir a
cualquier tipo de reproche, ejerce un papel catalizador sobre las expectativas
de cara a un 2015 que se presagia exigente. Y es que Silva se ha forjado al
calor de los retos; ahora piensa en lo que tiene por delante, en hacer una
preparación que ronde la perfección para asumir en plenas condiciones cada una
de sus metas, con la motivación que le caracteriza y ese instinto soñador que,
poco a poco, la ha llevado a hacerse un
lugar entre las mejores pertiguistas del mundo.
La preparación
Actualmente estamos en la etapa de fuerza , que es un poco
complicada porque incluye un volumen importante de ejercicios acrobáticos,
carreras y pesas. En lo personal me
siento muy bien, muy fuerte tanto psicológica como físicamente. Los objetivos
son claros y de momento hemos comenzado bien y avanzamos según lo planificado.
A propósito de objetivos, ¿Cómo será el itinerario
competitivo de Yarisley Silva?
Empezamos en abril, en Estados Unidos con los Drake Relays,
una competencia que me gusta mucho. Cuenta con dos momentos, el salto en el
centro comercial (Pole Vault in the Mall) y la competencia normal como parte
del programa del evento que será mi primera participación al aire libre en esta
temporada. Luego tenemos pensado insertarnos en Liga de Diamantes, participar
en al menos cinco paradas, competir en
los Juegos Panamericanos y en el mundial.
Metas
Mantener mi resultado en los Juegos Panamericanos y buscar
el título en el Campeonato Mundial porque es un resultado que al aire libre no
tengo.
¿Cuantitativamente hablando?
Lo primero que tengo que hacer es recuperar mi agarre a
4.30m pues durante toda la temporada anterior me mantuve agarrando por debajo
producto al déficit de preparación que tuve,
cuando establezca esta métrica pienso poder tener un rendimiento estable
sobre los 4.70 y los 4.75
metros .
El panorama internacional, ¿al tanto de las rivales?
Esta especialidad cuenta con excelentes atletas, muchas de
ellas en ascenso y además las nuevas figura que salen cada año. Hace unos días
supe de un buen resultado en Estados Unidos de una muchacha que progresó
bastante de un año a otro y logró saltar 4.75m, así que la competencia está
asegurada y con un buen nivel. Si algo
he aprendido en estos años es que no hay rivales débiles y como bien dice
siempre Yelena Isinbayeva, el primer y principal rival que tenemos es uno
mismo.
Esta temporada vuelven los Panamericanos, si nos remontamos
en la historia de tu carrera deportiva encontramos que el resultado que te sitúa en la órbita del salto
con pértiga internacional brotó, precisamente, de este escenario cuando en 2011
derrotaste a Fabiana Murer que llegaba a
México exhibiendo un doble título mundial. ¿Cómo lo recuerdas?
La competencia de Guadalajara la voy a recordar siempre
porque ha sido uno de los momentos más
bonitos de mi carrera. Esa actuación marcó un punto importante en mi
trayectoria y me motiva mucho rememorarla, me da fuerza. Espero poder mantener
mi resultado este año y pienso que pudieran ser unos buenos juegos para el salto con pértiga .
Río 16, especialmente para el salto con pértiga, pudiera ser una experiencia inolvidable…
Estoy segura de que 2016 va a ser un año muy fuerte, de
esfuerzo y de mucho sacrificio. Estoy preparada para asumirlo, y espero
culminarlo con mucha felicidad, pero antes hay que cumplir con esta temporada y
seguir trabajando para que las cosas salgan bien.
Algo que quieras agregar
Quiero aprovechar para enviar un mensaje de felicitación a
Yelena Isinbayeva a propósito del nacimiento de su bebé. Es una medalla de la vida, uno de los
momentos más lindos que como mujeres podemos protagonizar.
Y también a mis seguidores para agradecerles por todo el
apoyo que me brindan a diario y animarlos a luchar siempre por los sueños, no
importa si implica sacrificios porque la satisfacción de verlos cumplirse vale
por encima de todo.
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