Ángel Cruz As.com
Álvaro Martín (Llerena, Badajoz, 18 de junio de 1994), de sólo 17 años (tendrá 18 en los Juegos si va) podría compartir Selección olímpica en Londres con Jesús Ángel García Bragado, de 42. El presente y el futuro, juntos de la mano. El chaval pulverizó el récord de España júnior en el último Lugano Trophy, en Suiza, con una marca de 1h 22:12 en su primera competición sobre 20 kilómetros marcha. Y se encontró con que tenía mínima para la capital británica. Un salto de calidad vertiginoso.
"Perdí el reloj en el kilómetro 13 de la competición y cuando llegué a la meta y vi la marca pensé que el cronómetro estaba estropeado", cuenta, sonriente. "No me lo esperaba, en absoluto", añade. Martín se entrena en el Centro de Alto Rendimiento de Madrid con José Antonio Quintana, uno de nuestros sabios de la marcha.
Al principio, Martín se inclinaba por la carrera y brilló en la categoría cadete en 3.000 metros. "Comencé a crecer y a tener problemas en las rodillas, así que me dediqué a la marcha, donde hay menos impacto con el suelo", cuenta el atleta, que comparte grupo de entrenamiento, entre otros, con José Ignacio Díaz y Julia Takacs, la gran promesa femenina de la especialidad. "Cuando llegué a Madrid, con 16 años, todo me sorprendía. Les veía como unos inmensos profesionales".
Martín y Quintana tienen las cosas claras. El gran objetivo del año siguen siendo la Copa del Mundo de Saransk (Rusia), el 12 y 13 de mayo, y, sobre todo, los Mundiales Júniors de Barcelona, del 10 al 15 de julio. "No hay que precipitar las cosas", asegura Quintana, "se entrena como un buen júnior, que es lo que tiene que hacer". Añade Martín: "Y luego, si los seleccionadores quieren llevarme a los Juegos Olímpicos, pues estupendo".
No esquiva el espinoso tema de la sanción de Paquillo Fernández: "Te llames como te llames tienes que cumplir. Ha cometido un gran error y debe pagar. La sanción es justa. No podrá estar en Londres, pero yo le animo a que siga hasta los próximos Juegos Olímpicos, los de Río de Janeiro. Tiene edad para ello. Fíjese en Jesús Ángel Bragado...".
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