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Aunque Paquillo Fernández invirtió buena parte de sus
ganancias deportivas en buenos preparadores no consiguió evitar la tentación
del dopaje. Cumplió dos años de sanción por su implicación en la 'Operación
Grial'. Se sintió utilizado y traicionado por las autoridades deportivas españolas.
Se quedó sin fuerzas para volver al nivel al que estaba acostumbrado y lo dejó.
No le importa recordar. Le molesta que se opine sin saber.
A pesar de su esfuerzo por rodearse de los mejores
preparadores, ¿se ha sentido perdido?
No. El deportista sabe lo que tiene que hacer en cada
momento y elige el camino que cree conveniente. Algunas veces nos equivocamos.
La mayoría de las veces acertamos con la gente que nos ayuda.
¿Qué le incitó a buscar un atajo?
Es un tema en el que no me gusta profundizar. Lo que diga se
puede tergiversar. Se miran las cosas diferentes y nunca como yo las quiero
decir. No me apetece decir cosas que se pueden cambiar.
Aquí está todo grabado con una cámara.
Pero al final esto se pasa a escrito y se cambian cositas.
Pero es un asunto qué usted ha asumido con cierta
naturalidad.
Sí. Puedo asumir algo y los medios cambiar totalmente la
versión. Puedo decir que iba a coger el coche después de tomarme una cerveza,
después no cogerlo y los medios decir que he cogido el coche muchas veces
bebido. Yo lo tengo claro y lo dije en su día: yo tenía una botella de vino
aquí, pero no cogí el coche.
Usted cumplió su sanción, colaboró con la autoridades, se le
rebajó la sanción en un principio, luego se le aplicó íntegra. No pudo acudir a
los Juegos de Londres y dijo que se sintió engañado. ¿Precipitó todo eso su
retirada?
Es un tema dañino. Se especula sobre qué tipo de
colaboración presté cuando evidentemente hay un juicio pendiente y debo estar
callado. Hubo presión de muchas instituciones. Lo de los Juegos fueron
intereses deportivos que no me explico. Paquillo no podía estar en Londres. Si
la ley Osaka no se lo cargó había que sacar otra cosa. Me he sentido
politizado. Pagué el pato. A lo mejor sí que ha sido el desencadenante de mi
retirada. No habría soportado otros cuatro años de espera.
¿Cumple una condena social paralela a la deportiva?
Soy una persona que lee lo justo y tampoco veo que la gente
me señale con el dedo. Tengo muchos amigos y gente que me aprecia. Aún tengo
seguidores y gente que me quiere. Y habrá otra gente que no sea partidaria de
Paquillo Fernández.
¿Existe o ha existido un pacto tácito de silencio sobre
posibles malas prácticas médicas en el atletismo español?
Cada uno es grandecito. De lo que desconozco no me gusta
opinar. La gente opina sin saber y me molesta. Como no sé, no opino. Te he
dicho lo que considero que se hizo conmigo. No puedo opinar de nadie. Competía,
ganaba las medallas y después la gente valoraba. Todo el mundo entrena, se
sacrifica, compite y gana lo que tenga que ganar.
¿Han sido las instituciones diligentes a la hora de prevenir
o atajar comportamientos tramposos?
No sé cómo actúan las autoridades. Los deportistas pasamos
una serie de controles semanales, mensuales, cada tres días cuando competía. Yo
sé de eso. De cómo funciona la ley antidopaje sé que es muy liosa y que no se
aclara. Lo sé porque la he pagado yo.
¿Cómo ha llegado el atletismo español a los niveles
deportivos bajos del presente?
Hay un cambio generacional en el que se van grandes atletas
y tienen que salir los que van llegando. Hay un tiempo de adaptación en el que
va a costar que los resultados salgan. Con buena gestión en un momento delicado
y sin dinero, sin patrocinadores, y en un nivel de atletismo que no es el de
antes, creo que se puede salir. Es un deporte bonito que le gusta ver a la
gente y hay que saber venderlo.
¿Hay que querer mucho al atletismo para estar 23 años al
frente de su Federación y no cansarse?
Al final se hacen unas elecciones y se elige al que gana. No
voy a entrar. A lo mejor otras personas se habrían cansado. No es el caso de
Odriozola. Si se presenta y gana las elecciones no se puede decir nada. Todo se
hace legalmente.
Hay voces claras dentro de los propios atletas que piden una
regeneración. No sé si eso casa con un presidente casi perpetuo.
Es lo que te digo. Ha habido cambios ahora y se verá dentro
de cuatro años. La situación económica es difícil. En mi época hubo un
atletismo increíble y hay que trabajar para volver a ese nivel.
Se ve como Manolo Martínez recongiendo una medalla olímpica
años después.
Espero que no. No me gustan ese tipo de medallas. Al final
ensucian el deporte. No la valoraría tanto.
Imagina una fórmula para mejorar el atletismo.
El marketing del atletismo debe ser diferente. Se debe
apoyar el atletismo de base, promocionar todas las disciplinar por igual. Es
importante la existencia de un referente que ahora no hay. Sabiendo que no hay
dinero pero hay que moverse mucho más. La crisis nos está enseñando cómo
gestionar.
¿Cuál es el plan personal que se ha preparado Paquillo para
sí mismo?
Estoy muy bien en un negocio que conozco. En definitiva,
quiero ir creciendo con mi marca de running (Run 04). Me da la ocasión de
seguir cerca de muchos populares y asesoro a algunos atletas profesionales. No
descarto entrenar a algún marchador. De momento el tiempo no me lo permite.
