La sanción de dos años que pesaba sobre el pertiguista italiano Giuseppe Gibilisco, campeón mundial, ha sido revocada por el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS), por lo que el italiano piensa ya en "el podio de los Juegos Olímpicos de Pekín". "Es el final de una pesadilla", comentó el saltador, de 29 años y que ganó los Mundiales de 2003 y el bronce en los Juegos de Atenas un año después. Gibilisco fue acusado por su presunta implicación en una operación de dopaje desvelada por la policía italiana que comenzó en 2004. La investigación estuvo focalizada en la relación entre deportistas y el doctor Carlo Santuccione, que presuntamente habría suministrado sustancias prohibidas a distintos atletas. Gibilisco fue inicialmente suspendido en julio por la Federación italiana. Sin embargo apeló en septiembre argumentando que nunca había dado positivo en un control antidopaje. La sanción se mantuvo por un tribunal deportivo en octubre, obligando a Gibilisco a plantear un recurso ante el TAS que finalmente le ha dado la razón.
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