César F. Buitrón / León
Para subir al podio hay un primer trámite que a lo largo de la historia se le ha atragantado a grandes campeones. Sergio Sánchez sabía que una semifinal es siempre traicionera y, por eso, optó por la carrera más inteligente posible. Lanzó la prueba en su primer kilómetro para limpiar la carrera y poner en fila a los atletas, se resguardó después en el grupo y volvió a acelerar a 1.000 metros de la llegada para eliminar a los más flojos de la carrera. Una vez cumplido el objetivo se limitó a entrar entre los cuatro que se clasificaban para la final, sin preocuparse de la exhibición que parecía querer dar el keniata Choge, que ayer demostró que su mejor marca de la temporada no había sido una casualidad.
Para Sergio Sánchez el tercer puesto que conseguía por detrás de Choge y del último talento de la ‘factoría’ etíope, Dejen Gebremeskel, que le superó sobre la línea de llegada, aunque en esta carrera lo de menos era el puesto final, sino entrar en una final en la que también logró colarse el otro representante español, Jesús España, que fue cuarto en la segunda serie que dominó el keniata nacionalizado estadounidense Bernard Lagat que podría ser un enemigo de cuidado si nadie lanza la carrera de mañana.
Sergio Sánchez no ocultaba su satisfacción al final de la carrera. “Ha salido todo como estaba previsto. Decidí acelerar la carrera al principio para cubrirme las espaldas por si era necesario entrar por tiempos. Al final no ha sido necesario y la verdad es que me he encontrado muy bien en la carrera”, señalaba Sergio Sánchez que espera estar perfectamente recuperado para la final. “Espero que estas horas me sirvan para asimilar el esfuerzo de hoy, que hemos corrido rápido y poder hacerlo como sueño en la final”, sentenciaba el atleta gordonés que no renuncia a nada en la carrera decisiva. “No he ocultado nunca que vengo al Mundial a buscar una medalla y voy a ponerlo todo de mi parte para tratar de conseguirla”, remataba el leonés que aspira a convertirse en el segundo español que consigue un oro en un Mundial [el tercero si se cuentan los Juegos Mundiales] con la curiosidad que los dos metales dorados anteriores de la selección española llevan firma leonesa ya que los lograron Colomán Trabado en los Juegos Mundiales de 1985, y Manuel Martínez en el Mundial de Birmingham 2003.
Sobre el papel los grandes rivales de Sergio Sánchez deberían ser Choge en una carrera rápida, Lagat en una prueba lenta y Tariku Bekele en cualquier tipo de carrera, pero sin perder de vista a Dejen Gebremeskel, a James Kwalia C’Kurui y a Sammy Alex Mutahi que pueden ser los ‘tapados’ de la final en la que Sergio Sánchez tendrá que meditar si deja hacer a sus rivales o si se pone en cabeza y corre a un ritmo que ‘reventaría’ a la mayoría, pero que podría complicarle sus opciones en el final de la prueba.
Selección española
Al margen de la actuación de Sergio Sánchez, la selección española también firmó unas cuantas actuaciones de mérito más. En 1.500 metros Diego Ruiz pasó sin problemas mientras que el vallisoletano Álvaro Rodríguez quedaba sorprendentemente fuera. En la misma distancia pero en mujeres, Natalia Rodríguez, controlando y gastando pocas fuerzas, firmó su pase a la final.Ángel David Rodríguez (60 metros), Felipe Vivancos (60 metros vallas) venciendo en sus respectivas series y Digna Luz Murillo (60 metros) han logrado su pase a semifinales venciendo además en sus respectivas series. Ruth Beitia se clasificó con facilidad para la final de altura, logrando en calificación 1,92 m con un concurso limpio, al igual que sus rivales, la croata Vlasic y la kazaja Aitova.
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