EFE
El estadounidense Ryan Crouser se convirtió hoy en el nuevo
campeón olímpico de lanzamiento de peso al imponerse en la final de los Juegos
de Río de Janeiro batiendo el récord olímpico con un lanzamiento de 22,52
metros.
El mejor lanzamiento de Crouser dejó para la historia de los
Juegos una vieja plusmarca, la que aún ostentaba el alemán Ulf Timmermann con
los 22,47 metros
logrados en Seúl 1988.
Tras el estadounidense, se situaron su compatriota Joe
Kovacs, plata con 21,78
metros , y el neozelandés Tomas Walsh, que se quedó el
bronce con un lanzamiento de 21,36.
Crouser, de 23 años, sucedió con su triunfo al polaco Tomasz
Majewski, que hoy no pudo pasar de la sexta posición.
En una final en la que apenas cinco atletas pasaron de los 21 metros , el nuevo
campeón, que disputaba sus primeros Juegos, ya apuntó al título en su segundo
lanzamiento, que superó los 22
metros (22,22). Antes del quinto, el definitivo, también
el tercero se fue unos centímetros más allá (22,26).
Crouser completó así unos Juegos soñados, proclamándose
campeón con récord olímpico en su primera participación.
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