viernes, 9 de octubre de 2009
Jacques Rogge, reelegido hasta 2013
EFE
Jacques Rogge ha sido reelegido hoy presidente del Comité Olímpico Internacional (COI) por un periodo de cuatro años más, hasta 2013, plazo máximo que puede permanecer en el cargo según la Carta Olímpica. Ratificado con 88 votos a favor y uno en contra en la 121 Sesión del COI que se celebra en Copenhague, el cirujano belga ha ganado ante la ausencia de más candidatos.
Rogge fue elegido presidente en 2001, después de que Juan Antonio Samaranch abandonase el cargo. El primer mandato es de ocho años, renovable por otro de cuatro que comienza ahora. "Nos queda mucho por hacer", dijo Rogge tras ser reelegido. "Estrecharemos las diferencias deportivas entre los países desarrollados y en desarrollo; y entre los hombres y las mujeres. Redoblaremos nuestros esfuerzos para poner el deporte al servicio de la humanidad, para inspirar por igual a jóvenes y viejos, para dar a los atletas la oportunidad de dar ejemplo", ha añadido.
La concesión de los Juegos Olímpicos a un país sudamericano por primera vez en la historia -los de 2016 a la ciudad brasileña de Río de Janeiro, hace una semana- y la creación de los Juegos Olímpicos de la Juventud, cuyas primeras ediciones se disputarán en Singapur en 2010 (verano) e Innsbruck (Austria) en 2012 (invierno) han sido los principales hitos de la primera parte del mandato de Rogge.
Se celebraron los Juegos de Salt Lake City 2002, Atenas 2004, Turín 2006 y Pekín 2008, todos concedidos en el periodo de Samaranch, y también se otorgaron los de 2010 a Vancouver, los de 2012 a Londres y los de 2014 a Sochi; antes de que venza el mandato de Rogge se elegirán los de invierno de 2018 y los de verano de 2020. Los apuros que pasó Grecia para organizar con éxito los Juegos de Atenas 2004 y la polémica que acompañó el relevo de la antorcha de Pekín 2008 han sido los momentos de mayor tensión en esta presidencia.
Rogge, regatista olímpico en 1968, 1982 y 1976 y ex miembro de la selección belga de rugby, se propuso al llegar al frente del COI reducir el coste, el tamaño y la complejidad de los Juegos, aunque la realidad le ha obligado a conformarse con detener su crecimiento. En el plano económico, las nuevas amenazas terroristas internacionales dispararon los gastos de seguridad para las ciudades organizadoras. Y en el deportivo, la resistencia de las federaciones internacionales impidió una reducción sustancial del programa olímpico. Después de poner en la puerta de salida a deportes como el pentatlón moderno, la natación sincronizada o el piragüismo en aguas bravas, Rogge hubo de tragar con una revisión cuatrienal del programa. En 2005, tras una serie interminable de votaciones, se eliminó el béisbol y el sóftbol para los Juegos de 2012, pero no se aprobó que otros les sustituyeran. Para los de 2016 hoy mismo se votará la admisión del golf y de rugby a siete.
El COI aumentó sus ingresos por patrocinio desde los 663 millones de dólares del ciclo olímpico que concluyó en Atenas hasta los 883 del que terminó en Pekín 2008. En la venta de los derechos de televisión, Rogge ha roto con la costumbre de negociar con bloques de países, como los agrupados en la UER, para sellar contratos país por país. El COI dispone actualmente de reservas por valor de 455 millones de dólares, que le permitirían sobrevivir cuatro años en el caso hipotético de que, por cualquier circunstancia, se suspendiese una edición de los Juegos. Rogge mantiene una política de tolerancia cero contra el dopaje, traducida en un aumento de los controles y en un endurecimiento de las normas internacionales, que obligan a los deportistas a estar localizables 24 horas al día.
Tampoco desea que la sombra de la corrupción planee sobre el COI. Expulsó al indonesio Bob Hasan por estar condenado en su país y al búlgaro Ivan Slavkov por mostrarse dispuesto a vender su voto en la elección de los Juegos de 2012, según reveló un programa de televisión con cámara oculta. Un Yong Kim, también condenado por los tribunales surcoreanos, fue suspendido del COI y dimitió antes de que le expulsaran.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario