miércoles, 13 de agosto de 2008

Otra superdotada del Rift


Maria Mutola, reina africana de los 800 durante dos décadas, campeona olímpica en Sydney'00 y plusmarquista del continente negro desde hace casi tres lustros, ha encontrado a su sucesora en una keniana de 18 años que en 2008 ha revolucionado una distancia necesitada de una nueva referencia mundial. Tras el último fogonazo de la británica Kelly Holmes en Atenas'04, esta prueba dominada tradicionalmente por las atletas rusas, ha cedido el protagonismo a una mediofondista del Valle del Rift.

Tan sólo Yelena Soboleva, líder del curso (1:54.85), sostiene la bandera de su país y planta cara a Pamela Jelimo, la adolescente que ha dominado las cuatro citas de la 'Golden League' disputadas este año –aspira a un premio de un millón de dólares si se impone en las dos restantes– en su primera temporada en la élite. "Quiero que mi madre se sienta orgullosa de mí", declaró antes de partir hacia Pekín, donde afrontará sus primeros Juegos como principal favorita.

Rodah Jeptoo Keter, progenitora de la criatura, proyecto de atleta durante la década de los 70 hasta que su prematuro matrimonio le obligó a cambiar la pista por las tareas del hogar, alivia con los méritos de su hija su frustración personal. Como ella, Pamela se dedicó a los 400 hasta el pasado abril. Empujada por su compañera de entrenamientos, sólo entonces dio al salto a la doble vuelta al anillo.

Es posible que hoy, apenas cuatro meses después, Janeth Jepkosgei se arrepienta de haber realizado aquella recomendación. Desde entonces, la campeona en el Mundial de Osaka se ha visto relegada a un segundo plano. En la pasada reunión de París, Jelimo rebajó el récord de África hasta 1:54.97, décima mejor marca de todos los tiempos y 22 centésimas más rápido que el anterior continental, en poder de Maria Mutola. Sólo dos meses antes, Jelimo estableció una nueva plusmarca júnior y en la capital china no renuncia a batir la absoluta, que cumple 25 años en poder de la checa Jarmila Kratochvilova.

A pesar de su corta edad y experiencia en la distancia, ni siquiera las condiciones meteorológicas de Pekín, preocupantes para algunas –sobre todo para las rusas–, le hacen dudar. "El tiempo aquí es excelente", comenta en ya la Villa Olímpica antes de acudir al entrenamiento. "Hace calor y tendré una buena oportunidad. Si la pista se encuentra en buenas condiciones y el ritmo de carrera es alto, iré a por el récord".


La pértiga mágica de Isinbayeva

A Wariner aún le quedan lejos los mágicos 43.18 de Michael Johnson. Quizá caiga antes su marca en los 200 (19.32). Sin la presencia de Gay y Carter, EEUU presenta a Spearmon (19.65) y a Dix (19.69), aunque el más temido es jamaicano, Usain Bolt, 19.67 este año. Habrá que contar también con el récord de turno de Isinbayeva. Con su pértiga buscará los 5,05 m. sólo un centímetro más. Cuestión de rentabilidad.

Pero, quizá, el más emotivo tras los 200 sea el que desde hace tiempo ronda Vlasic. La imponente croata, 2,07 m. en salto de altura, se encuentra a sólo dos centímetros de la búlgara Kostadinova, poseedora desde 1987 de la plusmarca más antigua. El duelo entre Defar y Dibaba también podría ofrecer un nuevo registro en los 5.000, en poder de la segunda desde junio (14:11.15). Y, por qué no, Bekele podría darle un nuevo mordisco a sus 26:17.53 en 10.000.


El desaparecido héroe local

Bolt, Gay y Powell, duelo a tres bandas en la final de 100 más esperada. La irrupción del primero, con un nuevo récord mundial (9.72) en una prueba en la que apenas había competido, ha puesto las pilas a los otros dos. Gay, sin plaza en 200, se lo juega todo a una carta, como Powell. El estadounidense asegura que el vencedor deberá bajar 9.70.

Para el público local, la gran batalla se producirá en los 110 metros valla. Liu y Robles frente a frente. Colin Jackson apuesta por el cubano, pero Liu, desaparecido desde hace meses, reserva alguna sorpresa. En los 400 lisos, la hegemonía de Wariner se ve alterada con la aparición de Merritt. Si baja de 43.90, el texano es imbatible. Imprevisible, aunque el etíope parte con mucha ventaja en una carrera rápida, será el cruce entre Bekele y Lagat. El primero, también defenderá su corona en los 10.000. El segundo tratará de suceder a El Guerrouj en los 1.500 metros.


Manolo Martínez abre la veda

El Nido de Pájaro estimula a Manolo Martínez, el primer atleta español que entrará en competición en la jornada del viernes (3.05 horas, TVE-1). "Al verlo, me sentí como los gladiadores cuando entraban en el Coliseo". El lanzador leonés, presente en sus cuartos Juegos Olímpicos, será el único atleta español que, de clasificarse, disputará una final el primer día. "El corte estará en 20.40 metros. Mi objetivo es realizar marca del año (20.39) y pasar a la final". El mismo entrará en acción el trío del 1.500 metros. Higuero, Casado y Estévez participan en la prueba más abierta de los últimos tiempos. Para Higuero, cualquiera de los 12 finalistas tiene opciones.

Marta Domínguez, tras participar en los 1.500 en Atlanta y en los 5.000 en Sydney, afronta ahora los 3.000 obstáculos con más ilusión que nunca: "Es como si llevara toda la vida corriéndolos". También debutará otra de las grandes esperanzas de medalla, Yosephine Onyia, en los 110 metros valla, y Carlota Castrejana, en triple salto. Y al día siguiente, Paquillo en los 20 kilómetros marcha, la apuesta más fiable. José María Odriozola sueña con cuatro medallas, como en Barcelona.

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