En el estadio nacional del 'Nido del Pájaro' no entró una sonrisa española, sin la decepción de Paquillo Fernández, que sale de una gran competición sin medalla tras un ciclo infalible que duraba desde 2002. Como suele ocurrir en las pruebas de 20 kilómetros marcha, cuando se cubrieron las tres cuartas partes del recorrido se decidió quién merecía el podio y quien no. El ecuatoriano Jefferson Pérez, el gran rival presumido del español, apretó el paso. Paquillo no respondió, sí lo hizo el ruso Valery Borchin que terminó abriendo un amplio hueco para entrar solo en el estadio con 14 segundos de ventaja sobre Pérez, que conquistó la plata, y 41 segundos sobre el australiano Jared Talent.
Paquillo acabó roto en la séptima posición, a un minuto y medio de su objetivo, que era la medalla de oro. Tampoco estuvo a la altura el campeón olímpico en Atenas, el italiano Ivano Brugnetti, quinto, por detrás de chino Hao Wang.
Borchin permaneció inactivo hasta el movimiento de Jefferson Pérez y Rusia clamó su venganza cuando parecía desposeída a última hora de su hombre principal, Sergey Morozov, autor del récord del mundo, que desapareció de la lista de salida inexplicadamente, aunque con los rumores de dopaje consustanciales a estas desapariciones.
Borchin no batió el tope mundial, ni tan siquiera el récord olímpico, pero ganó el oro con una autoridad indiscutible, codeándose con los máximos favoritos y marcando un tiempo de 1h 19:01, lejos de su mejor registro personal (1h 17:55). Sacó de punto al gran Jefferson, que disputaba su última competición. El ecuatoriano reguló lo suficiente para conservar su plata de despedida, mientras detrás de él se desfondaba el valiente australiano Talent, que conservó la medalla de bronce con cinco segundos de ventaja sobre el chino Wang, que venía de atrás con mayor empuje.
La decepcionante actuación de Paquillo no se podía imaginar durante buena parte de la prueba. El granadino, fiel a su historia, no tiene más estrategias que la de tirar para adelante y marcar su ritmo. Cree saber hasta donde puede aguantar. Así, junto con el italiano Brugnetti, se dedicó a enseñar su torso y su dorsal en la primera fila, siempre tirando a un ritmo sostenido. No aguantó el cambio.
Valery Borchin, que cumplirá 22 años en septiembre, se había presentado en sociedad a los 19 años consiguiendo la medalla de plata en los Europeos de Gotemburgo, en 2006, donde Paquillo Fernández se proclamó campeón continental de 20 kilómetros marcha.
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