miércoles, 2 de octubre de 2019

McLEOD INVADE LA CALLE Y PRIVA A ORTEGA DE UNA MEDALLA

JUANMA BELLÓN
AS.com

Orlando Ortega iba a ser oro, plata, bronce… Nunca se sabrá. Cuando quedaba una valla, el jamaicano Omar McLeod se cruzó en su camino, trastabillado y lo sacó de carrera. Durísimo. Ortega no tuvo capacidad de reacción y quedó quinto del mundo (13.30) en una carrera que ganó Holloway (13.10), fue segundo Shubenkov y tercero Martinot, porque tuvieron la suerte de no tener al inestable caribeño a su lado. Una bomba de relojería cuando está en carrera.
Era una final caliente, con el estadounidense Holloway y McLeod, dos antónimos a Orlando. Corredores inestables, pero con una punta de velocidad tremendísima. Son un disparo al aire, pero si sale bien puede ser letal, para ellos y para la gente que les rodea. Las vallas son vallas, la prueba menos predecible y con estos dos atletas más. También en juego Shubenkov y Martinot, más similares a Ortega. Y se dio la salida…
Orlando arrancó mal, pero no es nada raro. Su remontada comenzaba a partir de la quinta. La carrera era la prevista, ganar posiciones y llegar hasta donde hiciera falta, porque Orlando sabe que ellos tienen mejor arrancada. Ortega es seguro, fino y elegante, pero no McLeod, velocista total y vallista dislocado, que arruinó la medalla de Ortega al invadir la calle 5 de Ortega en el último obstáculo, en un momento en el que se podía reaccionar. Porque además McLeod dio varios pasos en el camino del español, que pasaba de cualquier manera la valla, con técnica desfigurada. Un lío, un dolor, una pena... para Orlando que estaba firmando una de las mejores temporadas de su vida.
 “De verdad no me lo puedo creer, esto es durísimo”, decía el español, que seguirá así sin medallas en los Mundiales. Tremendo.

No hay comentarios: