¿Sobrevivirá el atletismo?

Angel Cruz

Ayer fue un día durísimo, por muchos motivos: por las cosas que sucedieron, por las cosas de que hubo que informar, porque a mí me gusta escribir y ver cuatro páginas de atletismo en AS hablando de los éxitos de nuestros atletas o de las proezas de Usain Bolt, Tyson Gay, David Rudisha... y no por unos asuntos que rozan la crónica negra y se acercan a la sección de sucesos.
Ayer fue un sinvivir desde que supimos del asunto, poco después del mediodía, hasta que dejamos el periódico, pasadas la una y media de la noche. Las noticias se sucedían a ritmo vertiginoso, a veces de forma clara, otras de manera confusa.
Lo primero que se me viene a la cabeza de madrugada, cuando escribo este post, es preguntar si el atletismo va a sobrevivir a todo esto. Creedme: todo lo que está sucediendo es extremadamente grave. Nada que ver con el positivo de Alberto García y el 'caso' Paquillo Fernández. Lo del madrileño y lo del granadino, comparado con esta Operación Galgo, es una gota en el océano.
Lo que estamos presenciando ahora es un maremoto que no sé si se llevará todo por delante. No olvidéis que Marta Dominguez está en el ojo del huracán y que Marta, para bien, ha sido una persona muy querida y una atleta admirada. Pero ese reconocimiento se puede volver ahora en su contra con una fuerza inusitada.
De momento, todo esto ya ha 'matado' el Europeo de Cross (algunos atletas se han caído ya del equipo), al que íbamos con aspiraciones de victoria. La atención informativa del fin de semana seguirá centrada en el escándalo, más que en las carreras. Y si ganamos, alguien entre nuestros rivales de Albufeira dirá que nos llevamos el oro gracias al dopaje, aunque sea injusto.
Tengo en mis manos la nota de prensa del Ministerio del Interior en la que se hace balance de la Operación Galgo y me estremezco. Todo comenzó en el mes de abril y desde entonces muchos de los implicados han sido vigilados de cerca. A la hora de calificar a las personas detenidas (siempre con las iniciales de sus nombres, pero clarísimamente identificables) se dice de Marta Domínguez que es "atleta y suministradora de sustancias dopantes". Tremendo, ¿verdad?
Hoy (viernes 10) seguiremos escribiendo sobre el particular en AS, porque habrá noticias. Serán buenas para los amantes del deporte limpio. No tanto para aquellos que hacen trampas. Seguid de cerca la información.
Yo, en todo caso, quiero romper una lanza por los atletas españoles limpios, que los hay y en buena cantidad, que me consta que saben muy a menudo quiénes son los tramposos y que se aguantan como pueden. Sólo por ellos, el atletismo debe levantar la cabeza y seguir adelante. Pero...
Yo actualizaré el post cuantas veces pueda (al menos, una diaria). Y prometo contestar a todos los que dejáis comentarios en el blog, pero tenéis que darme tiempo.