J. J. MATEO
Mientras Marta Domínguez se prepara para declarar ante la titular del Juzgado número 24 de Madrid, probablemente esta semana, el cross de Venta de Baños, su cross, el que le vio correr por primera vez con 10 años, se tiñó ayer de rosa en su apoyo. La Operación Galgo ha golpeado los cimientos del atletismo español, pero Marta sigue siendo Supermarta en Palencia, donde ya el sábado se repartieron 300 cintas rosas con su nombre entre el público de la carrera popular.
Ayer compitieron los profesionales, con el suelo helado por el frío castellano. Alessandra Aguilar logró el triunfo en la categoría femenina (6.775 metros) en 23m 19s. El keniano Lukas Kimeli Rotich se impuso luego en la masculina (10.575) en 32m 20s. Los dos vieron pancartas colgadas y pintadas de color rosa (Tú siempre con nosotros, ahora nosotros contigo ¡Ánimo Marta!) en apoyo de la campeona mundial de los 3.000 metros obstáculos. A padres y niños que desafiaban las bajas temperaturas vistiendo la cinta rosa. Y a políticos locales, que antes de la prueba y después de ella hablaron de la presunción de inocencia y del respeto debido a la fondista.
Domínguez, colgada de las vallas publicitarias, era la imagen promocional de la prueba de campo a través, que ha corrido 25 veces. La atleta tenía cita el sábado para participar en un coloquio sobre su deporte, al que no acudió. Finalmente, vivió desde su casa palentina el apoyo de sus vecinos, convocado a través de varias redes sociales de Internet, entre ellas Facebook, donde más de 300 personas ya se han sumado a la página creada con el motivo Apoyo a Marta Domínguez.
Al final, el negro barro de Venta de Baños, ese color ceniza que es el sello de identidad de su cross desde hace más de 30 años, acabó teñido de rosa.
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