sábado, 11 de diciembre de 2010

DIMISIONES YA Y MILES DE AFECTADOS


Antxon Blanco

Yo divido las noticias del atletismo entre las de consumo interno para el atletismo y las que trascienden este deporte. Pues entenderéis que desde hace 48 horas vivimos una situación que supera el ámbito atlético.
Es por este motivo por el que me atrevo humildemente a exigir una reflexión en la propia Federación Española y a plantear seriamente dimisiones entre el Comité Técnico e incluso en la presidencia de José María Odriozola. No será sencillo, pero al menos es ahora mismo discutible si es mejor para el futuro del atletismo y si es necesaria una renovación para que todos nos creamos que vamos a vivir una nueva época.
Odriozola no estaba implicado en este escenario negro. Claro, de lo contrario le habrían echado a patadas. Pero es grave igualmente que no se haya enterado de nada, o no haya querido enterarse. Esas cloacas eran más nauseabundas de lo que todos imaginábamos. Yo he tenido y seguiré teniendo una relación impecable con Odriozola. Sin embargo, el noqueo es tal en este momento que demando una catarsis en la cúpula, total o parcial.
Las próximas 48 horas serán determinantes. Declaraciones de al menos 15 atletas, comprobación de sangre en relación a los restos encontrados en bolsas, comparecencia de Odriozola, qué se decide con la personas detenidas...
Dos cosas más os quiero transmitir. Me reafirmo en mi petición de considerar inocentes, y de creérnoslo, a los miles de atletas y deportistas que hay en este país. Se puede ser medallista sin recurrir al laboratorio. Al respecto hoy publico un artículo en DV. Significativo en este sentido el valiente comunicado de los atletas españoles internacionales. Las dos primeras versiones del comunicado eran mucho más contundentes, pero su posicionamieno es histórico y desde luego difiere diametralmente de lo que viene sucediendo entre los ciclistas. ¿Por qué será?
Y permitidme una licencia personal. Los párrafos que vienen a continuación se han publicado hoy en El País. Habla el donostiarra Ramón Cid, responsable del sector de saltos de la Federación Española.
"Llevábamos 30 años esperando esto", dice Ramón Cid, quien como atleta se sometió a una biopsia a manos de Laich, paso previo, según comprobó después, a una charla en la que el médico argentino le ofrecía pasar al programa verdadero, la suplementación.
Cid, que fue de los que no aceptó la proposición, recuerda aquellos métodos, importados de Bulgaria o Checoslovaquia, como algo muy "cutre", también como un choque tras el que empezó a ver el atletismo de "otra manera". Como entrenador, la otra manera se hizo náusea. "Yo debo de ser muy mal entrenador", dice, "porque comparado con los de otros, como los de Pascua, mis atletas no progresan apenas, no mejoran sus marcas espectacularmente...".
Por eso la alegría por la Operación Galgo, pero también la amargura. "Pienso en el atletismo", dice, "y por eso estoy triste. Pienso en que después de esto muy pocos aficionados creerán en la limpieza de la mayoría, en celebrar con alegría las grandes marcas y los éxitos. Siempre acabarán sospechando hasta de los más limpios". (...)
Ramón Cid es muy claro y sintetiza la opinión de miles de atletas y entrenadores que han pasado por el atletismo en los últimos 30 años.
Ya leéis lo que dice: "mis atletas no mejoran comparado con los de Pascua........."
Yo era uno de sus atletas.
Y sabéis qué os digo. Que le doy las gracias a Ramón por cómo me educó, por no incurrir en trampas, por enseñarme que el deporte no sólo es mejorar y ganar, y menos a cualquier precio.
Seguramente por aquellas experiencias, desde ese momento he estado muy en contra de los grupos-clanes que tenían a gurús siempre dispuestos a dar el pastillazo y con la jeringa en ristre. Yo, con 18 años, ya sabía que aquéllo no era atletismo, era un laboratorio ambulante, un fraude. En la pista reconocía quién estaba engañándome, y además, después, me pasaba por el morro sus éxitos y me enseñaba la camiseta de la selección. Eran unos pocos, cierto. Pero dolía. ¿Y ahora son más felices? En absoluto. Ahora son unos ex atletas, como yo, pero que no saben si sus 'grandes' marcas las hicieron ellos o el médico 'detodalavida'. Y sin embargo los atletas de Ramón y los de otros muchos entrenadores sabemos nuestra verdad. ¿No os parece que somos afortunados?

No hay comentarios: